Nota de prensa de dispers: incidente entre la policia canadiense y el gerente

Lo soy. He tenido que atravesar el océnano atlántico y cambiar de continente para caer en la cuenta de que lo soy: Soy un delincuente. Amigos, el que escribre estas líneas ha sido detenido y "casi amonestado" por la policia canadiense. Íbamos los miembros dispers, los titulares y el rooky (esto último no seré yo quien lo explique), desplazándonos hacia Quebec, disfrutando todos (menos uno) del placer que dejó en nuestras retinas el avistamiento de ballenas, cuando repentinamente vislumbramos un cojunto llamativo de luces en el espejo retrovisor de nuestro vehículo. Era cierto, había ocurrido, la policía nos estaba solicitando detener el coche. Del mismo, un apuesto y jovencito agente se aproximó y, tras comprobar que no teníamos ni idea de la lengua de la madre Francia, me informó que había violado el límite máximo permitido en aquel recóndito lugar: ibamos a 62 km/h en una zona limitado a 40 km/h. Solicitó amablemente mi pasaporte y carnet de conducir y se trasladó nuevamente a su vehícuylo, tal y como hemos visto cientos de veces en las películas de cine, con el objetivo de comprobar mi documentacion, credenciales así como verificar que el coche era alquilado (y no robado). Los minutos de comprobación se hicieron eternos. Minutos en los que me imaginaba pasando la noche en un calabozo infecto de la policia canadiense, custodiado por un camionero gay y un yonki en pleno síndrome de abstinencia. Pero no, afortunadamente los astros se alinearon a mi favor y el joven agente retorno a nuestro vehículo y pronunció unas palabras que me sonaron a ambrosía:Voy a darle un segunda oportunidad, no les voy a multar pero que sepan que la multa en estos casos es de 200 $. Di las gracias de forma efusiva, casi hasta el punto de hacer una reverencia y proseguí mi camino, con una mezcla de alivio y emoción contenida. Esa fue la experiencia policial, así que estos últimos días los he vivido en Canada amonestado y fichado por las fuerzas del orden. Lo recordaré durante mucho tiempo.

RRC

pd: los miembros originales de dispers quieren dejar clara su postura ante este asunto desmarcandose totalmente de cualquier relación con el nuevo gerente de dispers del que desconocían totalmente su nuevo historial delictivo y su comportamiento temerario en la conducción. Se reservan, por tanto, el derecho a la rescisión automática del contrato de gerencia del susodicho rookie amparándose en la cláusula de "legalidad" de su contrato. Y reservándose la reclamación de las compensaciones pertinentes así como las acciones legales oportunas.